miércoles, 30 de mayo de 2012

Utilizando el pasado para construir futuro

“Deberíamos usar el pasado como trampolín y no como sofá”.
Harold MacMillan

En diversos seminarios, y fuera de ellos, he podido observar que existen muchas personas que viven su vida presente con recuerdos conflictivos del pasado, y los llevan con ellas a donde vayan. Estos conflictos del pasado por supuesto que son capaces de detonar emociones de tristeza, coraje, ira, decepción, etc. Y por lo tanto, el humor, energía y estado interno es afectado por el tiempo que mantengan este estado activo.

Un sólo pensamiento del pasado puede hacer estragos. Si estos pensamientos negativos se hacen frecuentes e intensos, con el tiempo causarán enfermedades y ahora tendrá no sólo el conflicto del pasado que carga, sino que ahora le añadirá una enfermedad. Recuerde que, como lo he mencionado en artículos anteriores, las emociones negativas debilitan su sistema inmunológico.

Todos hemos tenido situaciones difíciles y fáciles en la vida. Las fáciles no nos causan problemas y por ello, a veces ni las recordamos. Por lo tanto es mucho más ‘fácil’ enfocarse en lo malo.

Seguramente usted ha tenido que lidiar en algún momento con pérdidas y traiciones. Pregúntese hoy si ha hecho un buen trabajo interior para dejarlas atrás o si aún hacen parte de su diario vivir.

A continuación comparto con usted una técnica para que cada vez que el pasado le asalte por sorpresa, sea capaz de controlarlo y cambiar su perspectiva a voluntad. De esta manera empezará a educar su mente para que sepa qué es lo que usted desea hacer con esos pensamientos conflictivos.

1. Primero, recuerde aquella experiencia que lo deja tranquilo y que representa algún conflicto de su pasado. Trate de vivirla de nuevo, recordando los sonidos, palabras, olores e imágenes, así como a las personas que intervinieron. Dese cuenta si siente todavía el disgusto o el dolor del momento y describa para usted mismo cómo es.

2. Asuma una tercera posición, es decir, obsérvese a usted mismo y a la situación desde fuera, como si acabara de llegar a la escena. Lo que se busca con ello es que sus emociones no estén involucradas.

3.  Relájese y trate de comprender la situación desde los diferentes puntos de vista que la componen, es decir, desde el suyo y también desde el de los otros involucrados. Póngalos en una balanza y encuentre los pro y los contra de cada uno.

4. Note cómo la intensidad de sus sentimientos negativos va disminuyendo. Tome la decisión, aquí y ahora, de dejarlos atrás y de no volver a permitir que se adueñen de su presente.

Es muy importante darse cuenta de qué tipo de pensamientos tiene. La mente humana, cuando está ociosa, regresa a patrones anteriores y tiende a repetir lo mismo, porque ya obtuvo una ganancia con ello, ya sea positiva o negativa. Mi recomendación es que esté alerta, para que cada vez que suceda eso, sea usted quien decida qué hacer con esos pensamientos para sentirse bien. Repetir emociones negativas del pasado ni  ayuda, ni engrandece, ni motiva. Enséñele a su mente a trabajar por y para usted, siempre y sin restricción.

Si quiere avanzar más en el tema, escríbanos a misresultados@riquezaextrema.com y cuéntenos cuáles son sus principales retos a la hora de actuar o pensar en sus resultados extraordinarios. Le responderemos con múltiples opciones para que usted logre lo que quiere.

JaManza

lunes, 7 de mayo de 2012

Presos de ira


“La ira, si no es refrenada, es frecuentemente más dañina para nosotros que la injuria que la provoca”.

Séneca

Uno de estos días me di a la tarea de observar detenidamente a las personas que me encontraba camino a un seminario. Para mi sorpresa, detecté que muchas de ellas iban presas del mal genio, del afán, de la intolerancia, de sentimientos negativos.  Todos nos enojamos en diferentes momentos y puede ser por algo que nos hicieron, que no nos hicieron, o por algo que hicimos o dejamos de hacer.
El sentir enojo o ira es normal, pero la respuesta que usted le da a este sentimiento es lo que marca la diferencia. El gran problema radica en que  si cada vez que se enoja se deja llevar en automático por este sentimiento y no es capaz de ver más allá de la situación, le estará dando el poder al hecho que detonó ese estado.
Muy a menudo, el enojo se acompaña de pensamientos de venganza y rencor. Esto le puede llevar a humillar, criticar, juzgar peyorativamente, ofender, fastidiar y hasta a odiar a otra persona, sintiéndose culpable por ello o haciéndose cada vez más incapaz de convivir.
En el ámbito de la salud, el enojo, al igual que cualquier otro sentimiento negativo, repercute desfavorablemente en su bienestar físico ya que la química del organismo pierde el equilibrio y el cuerpo empieza a segregar sustancias para recuperarlo. Estas descargas, si se hacen muy frecuentes, deterioran el sistema inmunológico entre otras cosas, por lo que somos presas fáciles de enfermedades tales como gastritis, dermatitis, colitis o síntomas desagradables como dolor de cabeza que puede convertirse en migraña.
La cuestión es ¿Qué puede hacer usted contra el enojo? Pregúntese: ¿Para qué me sirve el enojo en estos momentos? ¿Qué me estoy diciendo con esto? ¿Es bueno para mí y para mi entorno? ¿Qué consecuencias puede tener si no lo manejo?
Recuerde que usted tiene poder total y absoluto sobre sus sentimientos. Una de las técnicas más eficaces para poder manejarlos es la respiración profunda, acompañada de la pregunta ¿Para qué? Otro recurso es el manejo del lenguaje asertivo: “Me siento enojado, pero puedo manejarlo” y esto impedirá que la tensión se acumule dentro de usted.
También es recomendable exteriorizar positivamente el sentimiento, pidiendo a los que se encuentran a su alrededor que le den unos minutos para calmarse y recuperar su armonía. Esta comunicación es muy importante.
El Dalai Lama dijo alguna vez que el éxito y el fracaso dependen de la sabiduría y la inteligencia, que nunca pueden funcionar apropiadamente bajo la influencia de la ira. Piense en los resultados que obtendrá antes de tener una mala reacción por ser preso de la ira; verá que esto le ayudará a controlarse y a generar valor a usted mismo  y a su entorno.
Si quiere avanzar más en el tema, escríbanos a misresultados@riquezaextrema.com y cuéntenos cuáles son sus principales retos a la hora de actuar o pensar en sus resultados extraordinarios. Le responderemos con múltiples opciones para que usted logre lo que quiere.
JaManza